Por Christián Gutiérrez
Los partidos PAN, PRI y PRD son un “gigante” con pies de lodo. Esa alianza no da para más y de ahí su debacle electoral este 2024.
Nadie como estos partidos políticos para cerrar los ojos y no querer entender la anatomía del mexicano. López Obrador los venció porque un referéndum es fácil para un gobernante en funciones que está haciendo cosas y las comunica bien.
Tampoco es tan complejo entender por qué los derrotó Claudia Sheinbaum, quien será presidenta de México. Desde mi experiencia, la comunicación “exquisita”, técnica, demasiado lógica se vuelve abstracta, por lo tanto, incomprensible.
Por el contrario, la comunicación sencilla, con palabras e ideas ordinarias, generan lo que se conoce como “sesgo de familiaridad” y, por lo tanto, se vuelve comprensible y más persuasiva.
La ventaja de comunicar o de hacer neuromarketing generando el sesgo de familiaridad, es que las audiencias son más receptivas a los mensajes porque al cerebro se le conecta mucho mejor cuando se le ofrecen cosas familiares y tangibles. El cerebro humano gusta de lo que puede recordar fácilmente y “palpar”, y al comunicar resultados de gobierno y ligarlos a una continuidad hace que las personas lo asimilen fácilmente.
Por el contrario, la oposición formal a Claudia Sheinbaum y los opositores ciudadanos hablaron mucho en términos de votar por la alianza Fuerza y Corazón por México, sobre ganar el Congreso de la Unión, evitar una mayoría calificada, para no permitir que se derrumben los organismos autónomos, la Suprema Corte o a favor de la democracia. Con sinceridad, nada más abstracto que todo esto.
El neuromarketing político y la neurocomunicación se utilizan para aliviar dolores o miedos de las personas y se puede explicar de manera muy simple cómo funcionó la comunicación de Morena, de su candidata y sus seguidores, o la comunicación del PAN, PRI, PRD, su candidata y sus simpatizantes.
Los programas sociales continuarán porque se construirá el segundo piso de la transformación. Nada más tangible que esta idea. En principio, la metáfora del segundo piso de la transformación es algo muy poderoso y los especialistas en semiótica lo saben y, en segundo término, pensar en perder los programas sociales o los apoyos que da el gobierno federal provoca miedo y ese miedo activó el instinto de sobrevivencia y el voto para continuar.
Por el contrario, como ya lo dije, el que ciertos nichos reciban el mensaje de que la democracia viva -por citar solo un ejemplo-, es muy poco significativo porque esta forma de gobierno y sus beneficios no se supieron desdoblar de manera más comprensible y tangible.
La comunicación política y el marketing político de Morena y su candidata ha sido consistente y eso sin duda les ayudó y les seguirá sumando; no así lo que hace la oposición PAN, PRI y PRD que, además, ya es un mamotreto de alianza que ha probado desde hace años no ser algo muy significativo para los millones de ciudadanas y ciudadanos que con su voto podrían generar un cambio de régimen político.
*El autor es consultor y capacitador, tiene estudios de doctorado en Política, de maestría en Comunicación, de maestría en Neuromarketing, de maestría en Ciencia Política y de licenciatura en Derecho.