Por Christián Gutiérrez
Durante todo el sexenio morenista de Obrador, se nos aseguró que sería combatiendo las causas de la desigualdad, la exclusión social y la pobreza, como habrían de superarse los problemas de la inseguridad pública.
López Obrador, aseguró que las becas y apoyos a jóvenes, provocaría que no se acercarían a los grupos criminales e, inclusive, remataba esta idea diciendo que “le arrancarían pueblo a la delincuencia”.
Nada de esto sucedió o ha sucedido con el actual gobierno morenista de Claudia Sheinbaum.
El joven que asesinó al alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, recibía un apoyo “del bienestar”, una beca, y eso no lo detuvo para nada. Es más, este joven de 17 años, vivió parte de su infancia y su adolescencia con las políticas del bienestar de Cártel de Morena.
Nada de esto le ayudó, porque nada de esto ayuda en el fondo.
La política social por sí misma, no resuelve de manera invariable los problemas de violencia y delincuencia, y esta mentira nos siguen contando los gobernantes de Morena y sus aliados PT y PVEM.
Por esto es que fracasará el nuevo Plan Michoacán para la paz y la justicia.
Ya se sabe: Morena solo se ha encargado de hacer padrones de personas para entregarles “apoyos”, a cambio de votos futuros, pero esa mezquindad seguramente les cobrará factura en las elecciones de 2027.
*El autor es consultor y capacitador, tiene estudios de doctorado en Política, de maestría en Comunicación, de maestría en Neuromarketing, de maestría en Ciencia Política y de licenciatura en Derecho / Redes sociales: @ChristiánConAcento
